Hace unos años comer en barra era sinónimo de comer solo y sentarse en mesa, significaba hacerlo en grupo, con familia y amigos. Actualmente la barra se ha impuesto como uno de los elementos y espacios principales de un restaurante, e incluso, los hay que sólo tienen el formato barra para servir a los comensales.

Las barras son además elementos centrales decorativos, de mármol, madera, hierro u otros materiales juegan con las combinaciones más locas y con las formas más divertidas, siendo un lugar donde «tiene lugar la acción normalmente. Una tendencia paralela al uso de las barras ha sido el uso de la mesa alta en bares y restaurantes, que facilitan el aprovechamiento de los espacios pudiéndolo compartir mesa a personas que vienen en solitario y también resultan ser rincones muy cómodos para comidas y cenas de grupo.

Dicho esto os exponemos una serie de ventajas frente al uso de mesa tradicional en tu espacio gastronómico favorito.

¿PORQUÉ ESCOGER BARRA?

1.Rapidez y charla segura.

Aunque siempre hay que mantener las formas y saber esperar tu turno, tenemos un servicio rápido y directo al tratar directamente con el camarero y a veces incluso con cocina. Además, vayas sol@o acompañado las barras son espacios muy sociales, difícil es no comenzar una charla con un desconocido o con el barman. Imposible aburrirse en primera línea del espectáculo.

2. Comodidad y libertad de movimientos.

Mesa alta o barra es igual al taburete alto. Estos complementos de barra se han perfeccionado y ahora es difícil que no sean quizá el mobiliario más confortable del restaurante, con respaldo seguro y un diseño que te acoge y que es perfecto para la movilidad y tu visión 360º del bar o restaurante. Puedes regular tu altura perfecta y hacer de la barra tu lugar donde trabajar, tomarte un café relajado, comer o tomarte una copa. Un espacio todoterreno con un ligero toque canalla.

3. Lugar desenfadado. No podemos negar que cuando te sientas en barra, sabes que tu plan es más alternativo y es que es la elección perfecta para un vermú informal, tomar unas tapas y sentirte menos violento si tienes una cita con un desconocid@

4. La cocina, todo un espectáculo. Aún es habitual que la barra «proteja» el espacio de cocina, pero también hay barras que están muy cotizadas. Hablamos de las que dejan una visión panorámica del escenario donde se da cita el chef con el resto de personal.

Aún así las mesas son insustituibles, porque hay pocas cosas más agradables que una larga sobremesa en familia, comer relajado son caos que te perturba y disfrutar de una distendida conversación. Además, no nos podemos olvidar de la experiencia de disfrutar de una mesa vestida entre elementos decorativos y una propuesta de menaje atractiva que es lo que denominamos en Servitel «arte en la mesa».

¿Y vosotros?, ¿Sois fieles a las mesas, o ya las habéis cambiado por la barra?